sábado, 19 de julio de 2014

¿Loco, yo?

Todos me decían que estaba loco, que era imposible que pudiera hablar con mi padre, o verle, que él no estaba con nosotros. Pero mentían. Todas las noches, manteníamos largas conversaciones frente a la chimenea. Un día, cansado de tantas mentiras, decidí matarlos a todos. Y entonces, como por arte de magia, ellos comenzaron a verle también. ¿Veis cómo no estaba loco?

miércoles, 16 de julio de 2014

No lo hagas

No finjas que estás aquí por mí.
   sé que no es cierto.
Cómo sé que no serás feliz
   en mi desierto.
No me hagas creer que me amas,
   si no lo harás.
No finjas que no pasa nada,
   pues no es verdad.
Sólo mírame a los ojos
   un instante;
aunque no entiendas por qué
   no has de amarme.

sábado, 12 de julio de 2014

Eres tú

Unos usan sus armas,
otros, los engaños
Hay quien con sólo palabras
es capaz de hacer daño.

Ellos no son como tú;
necesitan ser temidos.
Tú, sin embargo, eres luz,
eres brillo, eres sentido.

Eres sombra en el verano
y luz en la oscuridad.
Eres quien tiende su mano
eres sueño y realidad.

Ellos te envidian, lo sé;
porque tú eres tan perfecta.
Quieren parecerse a ti,
quieren tener tu belleza.

No sé si en verdad te amo,
o si todo esto es real
No sé si es por tus encantos,
o por tu forma de hablar.

Pero te miro a los ojos,
y mi pecho empieza a arder.
No sé si todo es un sueño

o es que te empecé a querer.

Un sueño

Caminaba por las calles de mi ciudad, cuando lo vi. Entonces lo ignoré, mas ahora me arrepiento. Porque aquello que vi era lo que más anhelaba en el mundo. No era oro, ni diamantes, ni el hombre de mi vida. Era un sueño, que dejé escapar porque desconocía su valor. Ahora, cada noche recorro esas calles, con la esperanza de que aparezca de nuevo ese sueño: Mi libertad.

Ella

Recuerdo cómo me miraba. El erotismo de sus ojos me obligaba a hacerlo, pero no podía, debía mantenerme en una buena postura. Hasta que un día, por fin, su mirada me dijo: ‘Adelante’ La miré, y la besé cómo nadie antes lo había hecho. Y ella,  con una sonrisa en los labios, me dijo: ‘Te amo pequeña’.

Ella jamás olvidaría aquella noche, y yo, yo jamás la olvidaría a ella.

Tú duermes, y yo, sueño.

No soy escritora, ni mucho menos. Simplemente, me gusta soñar. Y qué mejor forma de hacerlo, que con palabras.